miércoles, 5 de marzo de 2008

Mercerias SL una gran multinacional

El otro día buscando una bata (de estas blancas de medic@ locuel@) visite algunas mercerías albergando la "oKupa" esperanza de poder encontrar lo que buscaba en alguna de ellas.


Esto me hizo pensar, lo que veía al entrar a estos establecimientos casi siempre era lo mismo:
una "tienda" diminuta con una señora escondida detrás de un mostrador que rodeada de carretes de hilo de todos los colores, te dice "¿que quieres?".
Esa señora debe sentirse cómo una goma de borrar dentro de una caja de 300 lápices de colores...

Supongo que desgraciadamente para esta gente, una "mercería" es un negocio en decaimiento, son las tiendas de máquinas de escribir del siglo XXI, sólo en alguna pude observar que entre cremalleras, botones y broches se exponía alguna que otra prenda de lencería fina y no tan fina, mezcladas con algún pijama de esos que da gustito tener en una noche de invierno (igual que la lencería); en muchas ni siquiera había ovillos de lana de esos con los que mamá me hacía los jerséis que tanto añoro, ahora la gente apenas ni teje...




Imagino la respuesta de estas señoras a la pregunta "¿Usted en que trabaja?"...."Pues yo vendo botones y broches...ah! y velcros"...algo banal en apariencia.

Me parecen establecimientos muy confortables y que traen buenos recuerdos, es una especie de tienda de golosinas, hay cositas pequeñas, que en muchos casos son cómo recuerdos comprimidos en forma de botón.
Impresiona ver ese botón que se parece a aquél que arrancaste de la camisa que estorbaba entre tu y aquella persona o el que es igual que los que tenía la blusa que la abuela se ponía para caminar por el paseo marítimo aquellos días de vacaciones.

Pensando sobre estos sitios, recordé algo que leí hace tiempo y ahora (que tengo blog) me gustaría compartir "on my way":

Hubo un hombre una vez que decidió vender algo tan simple cómo cremalleras (esto parece el comienzo de una de esas historias con moraleja que tanto me gusta leer...pero es solo el comienzo de algo irrelevante en apariencia).
Nuestro hombre se convirtió en uno de los más importantes del planeta, siendo a la vez el más desconocido, su nombre Tadao Yoshida, dice poco de él...conocido en su casa de Japón a la hora de comer ¿verdad?...

Ni siquiera uno de sus logros mas importantes es conocido: fundó en 1934 la empresa más grande e importante del mundo (no es mocosoft) el nombre de la empresa es "Yoshida Kogyo Kabushikikaisha" sus siglas YKK están por todo el mundo civilizado (llamémoslo así aún sabiendo que no lo es).

Pues si, es curioso que una realidad tan patente pase desapercibida...es más, me atrevería a decir que todos o casi todos los días, tocamos con nuestros dedos esas tres letras (YKK) sin darnos cuenta.
Miren sus cremalleras por favor:


Posiblemente están ahí esas tres letras del mismo modo que están en mi cremallera, digo posiblemente porque la "mercería" del amigo Tadao tiene 80 compañías y 206 plantas de producción repartidas en 52 países, de modo que pone "broche" a casi la totalidad de prendas de vestir existentes. Su empresa es tan importante que incluso vive bajo la amenaza de los imitadores.
Es curioso, cómo se puede ser tan importante y tan desconocido, sólo quería resaltar esto: tan importante, tan metido en nuestras vidas y tan desconocido...




"Pues mira que bien..."

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Las encontré...las 3 letras...

Pregunta: por qué la búsqueda de la bata???

jagovi dijo...

Pues lo de la bata es para las practicas de química, normas del laboratorio...